El muro que separará Argentina de Bolivia estaría listo a fin de mes

El muro entre Argentina y Bolivia que impulsa la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, sigue en construcción y podría estar terminado antes de fin de mes. El cerco, ubicado en el paso fronterizo de Aguas Blancas en Salta, ya cuenta con el 95% de los postes instalados y se espera la colocación de una malla metálica de contención para terminar la obra.
La estructura tendrá 200 metros de largo y cubrirá la distancia entre la terminal de colectivos y la oficina de migraciones formando una especie de “U”. La construcción busca ordenar el flujo migratorio en la zona, que históricamente funcionó de manera informal, obligando a las personas a pasar por el control fronterizo. El cruce estará controlado por efectivos de Gendarmería y de la Prefectura nacional. Los postes tienen 3,5 metros de altura y están dispuestos a intervalos de 4 metros, con puntales de refuerzo cada 4 postes. El alambrado, que será más alto y reforzado que los tradicionales, estará compuesto por alambre romboidal de acero calibre 14 y contará con rombos de 5 centímetros de tamaño. La construcción del muro, que se anunció en enero de este año, fue duramente criticada por el gobierno boliviano. Tras conocerse la noticia, el Ministerio de Relaciones Exteriores del Estado Plurinacional de Bolivia emitió un comunicado para expresar su “preocupación ante el anuncio del Gobierno de Argentina de instalar una cerca de 200 metros en la frontera entre ambos países”. “Los temas fronterizos deben ser tratados por medio de mecanismos de diálogo bilaterales establecidos entre los Estados para encontrar soluciones coordinadas a temas en común”, sostuvieron desde la administración de Luis Arce, y por lo tanto expresaron que “cualquier medida unilateral puede afectar la buena vecindad y la convivencia pacífica entre pueblos hermanos”.