San Pedro quemó al diablo en el fogón “más grande de Córdoba”
Cientos de personas participaron de la tradicional ceremonia en esa localidad del valle de Traslasierra.
Miguel Ortiz para La Voz
Una gran cantidad de vecinos participó del tradicional fogón de homenaje a San Pedro. La quema del diablo es un ritual local que se suma a la tradición de los fuegos de invierno y del cristianismo, en este caso culminando con las fiestas patronales de San Pedro Apóstol.
“Esta vez, por la coincidencia horaria con el partido Argentina-Perú, dispusimos de dos pantallas gigantes para que la gente no se perdiera nada, y encendimos el fogón en el entretiempo”, explicó una fuente de la Municipalidad de San Pedro.
“A pesar del partido y del frío, tuvimos más de 12 mil personas, fue una multitud impactante y emocionante, que cada año crece más y con una mayor cantidad de turistas”, dijo la intendenta Silvina Cabezas.
El evento se completó con números de teatro, danza y música, además de una feria de comidas típicas.
El grupo teatral “5ntrato”, las academias de danzas “Maynumbí” y “C.G.”, el grupo folclórico “Sentires” y los cantantes Churli Corroza y Caro Arrieta animaron a la multitud reunida junto al Río de los Sauces.
Desde hacía muchas décadas, los fogones se realizaban espontáneamente en los pueblos y barrios de la región celebrando a San Juan y San Pedro. Pero a fines del siglo XX el municipio comenzó a organizarlo formalmente, buscando que la tradición no se perdiera.
A la fiesta se le agregó el folclore y la gastronomía local, configurando un atractivo turístico que resultó de alto interés para locales y visitantes.
Al evento se le sumó la llamada Quema del Diablo, un ritual iniciado en las patronales de Villa Dolores, ciudad vecina, por el histórico sacristán “Tino” Díaz. Se trataba de incendiar un diablo de cartón pintado, acción que era festejada por los niños luego de la procesión de la Virgen de los Dolores, cada 15 de setiembre.
En San Pedro, el demonio cobró carácter de arte efímero, cuando dos jóvenes artistas del pueblo comenzaron a diseñar anualmente representaciones de alto valor estético.
Las figuras desaparecían en minutos cada 29 de junio, bajo las llamas generadas por una montaña de restos vegetales dispuestos en un predio especial, cerca del puente de acceso a la localidad. Desde hace algunos años, es la Escuela de Artes de Villa Dolores quien realiza las figuras de los diablos que se van a quemar.
La directora de ese establecimiento, Marcela Focaccia, relató a La Voz: “Este es el diablo más grande de la historia del evento, tiene 14 metros, sobre una estructura de caño estructural con hierro, y está cubierto con telas, papel y cartón, lo diseñamos y trabajamos desde la cátedra de Escultura del profesorado de Bellas Artes, tras la propuesta de la Municipalidad de San Pedro”.
La enorme figura, fue realizada desde marzo por los estudiantes.
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